Uno de los miedos que se tienen a la hora de usar una bicicleta es que, cuando salgas de la compra o del trabajo, te encuentres con que no está donde la dejaste. Por eso queremos hablarte de cómo atar una bici para que no la roben o, al menos, ponérselo tan difícil a quien te la quiera quitar que no le merezca la pena perder tanto tiempo. ¿Quieres saber cómo?
Cómo amarrar una bicicleta para que no te la roben
Uno de los motivos por los que muchos evitan el uso de las bicicletas, sobre todo en zonas urbanas, son los robos. Sin embargo, hay algunas formas de ponerles las cosas difíciles a los 'cacos' y que estos desistan de sus intenciones. Pero, ¿cómo hacerlo?
Antes de nada...
Cuando te llegue una bicicleta, ya sea porque la has comprado o porque te has suscrito a un plan bici, debes asegurarte de apuntar el número de serie de la bicicleta (o preguntar a la persona responsable para que te lo diga). De esta forma, si te encuentras con este problema, puedes acudir a la policía e identificar tu vehículo.
En algunos Ayuntamientos también tienen un servicio de registro de bicis gratuito, de tal manera que esas bicicletas son más difíciles de vender en el mercado negro y los ladrones las obvian.
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Cuando tu bicicleta se queda en la calle
Tener que estar metiendo y sacando tu bicicleta de tu casa todos los días no es algo cómodo. Menos aún si hablamos del trabajo, ya que en la mayoría no te suelen dejar un espacio para que la coloques. Si ocurre esto, deberá quedarse fuera y, para asegurarla, es importante tener unos buenos candados y cadenas para fijarla y frustrar los planes de los ladrones de quedarse con ella.
Pero, además, conviene que:
Busques un lugar para atar la bici que sea visible, por donde pasen muchas personas. Así, si te conocen y ven a otra persona al lado de tu bicicleta, sospecharán y podrían avisarte.
Asegúrate que donde quieres atar la bici es un lugar que está bien anclado al suelo.
El truco sobre cómo atar una bici para que no la roben. Sí, hay un pequeño truco. Y es que cuanto más alto pongas el candado (mínimo a 50 cm del suelo) más difícil va a ser que lo abran o lo rompan (además de que llamarán más la atención).
No te quedes solo con una cadena y un candado. Para evitar que te la roben, lo mejor es usar dos candados y cadenas. Tienes que saber cómo amarrar una bicicleta para que no roben todas las piezas y dejen solo la que está atada.
Cómo atar una bici para que sea difícil que la roben
Lo primero que debes saber es que necesitas contar con candados de buena calidad. Un candado "normalito" y barato se rompe fácilmente, y no les costará nada abrirlo. Pero, si inviertes algo más en uno de mejor calidad, entonces se lo pensarán dos veces. En este caso, los candados antirrobo son de los mejores, porque una vez se colocan bien, es casi imposible que los abran.
Además, es importante que evites amarrar una bicicleta en un árbol o en una señal de tráfico. Ambas zonas son fáciles de romper. Así que, escoge lugares que estén bien fijados y no se rompan con facilidad.
Trata de rodear con la cadena partes de la bicicleta. De esta manera, no podrán robar nada de ella.
Consejos valiosos de ex-ladrones
Muchos ladrones han cambiado de vida y ahora intentan ayudar a los ciclistas para que estos no pierdan sus bicicletas. Por eso, te dejamos algunos consejos que evitarán que te roben la bici.
Si te encuentras la bici con una rueda pinchada, no se te ocurra dejarla donde está. Es mejor que te la lleves de allí porque eso puede indicar que están al acecho de ella y que pueden haberse ido para buscar las herramientas necesarias para robarla.
Si tu bicicleta es de las caras, no se te ocurra dejarla en la calle.
Asegura siempre tu bicicleta con dos candados fuertes.
Aprender cómo atar una bici para que no la roben es casi tan importante como saber montar en ella.
Y es que así podrás dejarla con seguridad en la calle cuando lo necesites sin estresarte o agobiarte por haberla dejado. Tiene la protección que necesita con los candados y la cadena.